Vida parangonable.
domingo, 23 de octubre de 2011
Sal de mí, deja de aferrarte a mis costillas de marfil.
Eres el sentimiento encontrado entre las ganas de matar a besos y a puñetazos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario